Con un oficialismo desgastado y con opciones que se montan sobre fenómenos nacionales, surge una alternativa distinta: Somos Villa Gesell, encabezada por Adrián Domínguez.

Perfil humano

Domínguez no es un político tradicional. De hecho, esta es su primera experiencia en política. Toda su vida estuvo ligada al trabajo: es el dueño de “El Semáforo”, un taller mecánico muy conocido en el Boulevard. Además, tiene una extensa trayectoria en el trabajo social y participa activamente en la Iglesia, lo que lo convirtió en una persona muy respetada en la comunidad.

“Es un vecino del que todos hablan bien”, repiten en su entorno, y eso explica por qué lo fueron a buscar para dar este paso: empezar a llenar la política geselina de gente buena y con ganas.

Contraste con los rivales

Mientras que el oficialismo pone al frente a Martín Arguiñarena, mano derecha del intendente Barrera y representante de una gestión que ya muestra signos de agotamiento, y que no logra resolver los problemas de seguridad, turismo y salud; la otra candidata, Clarisa Armando, arrastra un pasado marcado por la polémica en Rosario, emprendimientos vinculados al Estado y un paso por ANSES que no dejó buenos recuerdos. Hoy busca sostenerse detrás de la ola libertaria, sin un verdadero arraigo local.

Domínguez, en cambio, es lo opuesto a la “casta”: un vecino más, que decidió involucrarse para cambiar las cosas.

Diagnóstico y propuestas

El mensaje central de Domínguez es claro: Gesell está estancado. Y necesita salir del círculo vicioso en el que cayó, atrapada entre dos sectores que se disputan la Municipalidad como si fuera un botín.

Las prioridades que plantea junto a su espacio son concretas:

Seguridad, con prevención y presencia real.

Salud, con un sistema más ágil y eficaz.

Turismo, porque “en Gesell el turismo es trabajo”, y hoy está estancado, sin una política seria para recuperar la identidad de la ciudad.

Cierre inspirador

Adrián Domínguez representa a los vecinos de a pie, los que abren sus comercios todas las mañanas y creen que Villa Gesell merece mucho más. Con propuestas claras y una forma diferente de hacer política, busca ser la voz de quienes están cansados de elegir entre dos extremos y quieren una alternativa que piense primero en Gesell.